miércoles, 2 de diciembre de 2009

Un día extraño.


Amaneció en mi ventana de modo poco común... hoy segundo día de Diciembre y desperté mirando el cielo que algo quería comunicar...

Salí de mi casa con sabor extraño, un dejo a esperanza que creí muerta y lograba mover mi cuerpo al caminar.

La gente ya no sonríe preocupada de sus problemas... pude ver la burbuja en que viven...

Nunca antes había notado lo verde que son los arboles de Santiago... un verde brillante y profundo, tan mágico que era imposible evitar mirarlos. Sus hojas, las ramas que fielmente afirmaban aquella cubierta viva, ocultando nidos y cantos que pocos escuchaban tras el ruido citadino.

Con música en mis oídos, me dí el tiempo de caminar con calma, sin la esclavitud de las horas y de los horarios establecidos, estiré mi espalda y a frente en alto recorrí la calle, con un sol que pegaba a los ojos con su reflejo en vidrios y ventanales...

..Fué realmente extraño... Ultimamente estuve cuestionando el por qué ocurrió el término de mi relación, el por qué me cuesta superar las cosas, el hecho de que lo sigo extrañando... siempre aludiendo al "¿por qué?"...

Pero en un momento, me dí cuenta de que el momento pasó... ya hace mucho y que apesar de la rabia, la pena que me diera eso, no sacaría nada con pensar en aquello ya que sé que el tiempo no vuelve atrás... Miré mis manos he intente ver lo que realmente tenia en ése momento... Tengo una familia, tengo amigos, cercanos y compañeros... tengo fuerza y no tengo limites en mi cabeza más que mis miedos y dudas. Tengo esperanza, tengo una carrera que pretendo terminar, tengo muchas cosas aquí... ¿Y sólo por cuestionar lo que había pasado, había olvidado lo que tenia?...

Una vez planteada ésta pregunta en mi cabeza, pude reconocer que el día era extraño... Logré llegar a una conclusión evidente y que muchos ya me habían dicho... conclusión que no era capaz de llegar en otros día comunes, sólo tenía que pasar un día extraño para lograr abrir los ojos...

..y pensar que desee abandonar esas cosas que tenía en mis manos...


Dicen que el problema posee dos partes... la primera está en el reconocimiento... y la segunda en la superación...

Hoy lo reconozco abiertamente... y a partir de éste día tan extraño comenzaré a superarlo...



Sandra Jorquera