jueves, 24 de julio de 2008

Que fácil son algunas cosas.

Existen muchas cosas que a las personas nos suceden a diario, más aún recordamos aquellos problemas que nos mantienen pensando, buscando solución constante. Mas nadie se da el tiempo, y no quiero decir que no sean lo suficientemente capaces, de observar su propio entorno... Mientras maduramos, una metamorfosis se da lugar en cada mente... hay un caso particular de cambio que me ha llamado la atención nuevamente... La mentalidad materialista.

El ser materialistas, como forma de búsqueda de un soporte psicológico familiar, es un camino bastante recurrente en personas que en su infancia sufrieron carencias, aunque la generalidad, quedan con una suave marca de humildad, cuando son personas mayores, caen en eso, al intentar de entregarles todo lo que sus hijos quieren, pero... se da una sobre valoración de las cosas... quedan llenos de cosas, pero vacíos de adentro. Sino me creen, les puedo asegurar que hay muchas familias que saben más de sus mp4 y notebooks que de sus hermanos y padres.

Dentro de esta adicción a lo material, hay un punto que centra mi curiosidad, existen personas que se apegan tanto a las cosas, que me da para pensar en que se sienten tan solos, que lo único que sienten que los acepta tal cual son, son las máquinas. Es un trabajo constante, donde el perfeccionamiento virtual toma una gran participación emocional de cada persona, dentro de sus trabajos y hogares.

Es realmente impresionante, se nos han atrofiado aquellas costumbres de pasear, leer, dibujar en papel, salir con la familia, entre tantas cosas... que muchos se han perdido, con sus vidas, en eso... Debe ser muy divertido recordar chascarros en familia... aunque no debe serlo tanto recordar que se obtuvo el ultimo nivel de un juego y la ultima contraseña de no se qué programa, inventado por otros que sintiendose solos, no tienen más remedio que dedicarse por entero a la tecnología.

Yo no estoy encontra de la tecnología en si, sino que del abuso de ella.

Reconozco que nos facilita muchas cosas, pero nos hace olvidar la medula de lo que somos en realidad. Es algo deplorable... y es un error que se puede arreglar.

Ojalá que en un par de años más, aún escribamos cartas o mails de amor y no con numeros binarios.

Sólo eso espero.

jueves, 10 de julio de 2008

Cultura en la micro, caminar estepario.

Las personas están tan encerradas en sus ideas, que miran el suelo y siguen su rumbo. Con suerte se reúnen para saber sobre algún accidente que haya ocurrido en la calle o cerca de sus casas. Siempre voy por la micro, observando a la gente y he visto cosas que de una forma u otra me llaman la atención:

1º- Siempre veo varones que se sientan con una mano en el bolsillo delantero y la otra con el celular o con el mp3 o mp4 para los más ricos (claro está que me refiero a situación económica, no a belleza, recuerden que la belleza no siempre está ligado a la riqueza). Se balancean por la micro como si tuvieran algo "muy" importante en su bolsillo y se sientan como grandes jefes, con las piernas bien abiertas...(a veces se me imagina que necesitan ventilación por ahí, ya que eso sería la única razón por la cual podrían abrirlas, o más bien... tienen algún problema de inflamación que no pueden sentarse con las piernas un poco más cerradas...). Pasan todo el viaje callados y se ponen de pié tal cual como se sentaron, con cara de importancia magistral y se bajan del transporte como presidentes de la república.

2º- Siempre hay esas señoras que apesar de que algunas son bonitas tienen unos gestos que captan la atención de las moscas, me refiero a esa cara de seriedad, osea, entre seriedad, sueño, cansancio, desgano, aburrimiento, bueno tantas cosas que al final parece cara de pescado a medio morir. Siempre apoyándose a los costados del bus con cara de..."estoy mirando la melancolía de las sombras en la noche"... o ..."puta que tengo sueño"... y cosas así. Lo que me llama la atención es que cuando yo les sonrío, en pos de que se distraigan y sonrían también, fruncen el ceño y terminan pareciendose a un boxer con pintura de ojos. Tampoco hablan y pueden estar mirando por la ventana o a otro viejo guapo que esté abordo o por último al suelo... será por lo entretenido que es mirar ahí....

3º- Los ociosos, esos clásicos chicos de escuela que se sientan al fondo de la micro, con sus plumones, cortacartones entre otros... He notado que gracias a esas herramientas se ponen a escribir muchas cosas en el transporte, aún no entiendo con qué finalidad pero se respeta la libre expresión... Otra pregunta... ¿qué quieren expresar?. Hace unos días vi unas letras que no sabías si eran letras de nuestro castellano o eran dialectos egipcios, con su toque gótico más un dejo flaite de la zona. Aun intento entender, y lo único que entiendo, es que no entiendo nada.

4º- Los creativos, los clásicos que usan las imágenes para plasmar imágenes que para nuestra cultura, suponen algún grado de entretenidas y simpáticas. Un ejemplo actual es el letrero del bus que dice: CUIDADO PELDAÑO... y estos grandes creadores lo transforman quitandole los siguientes elementos...

CUIDA EL ANO...

...Bastante expresivo, ¿no lo creen?.

En general, los habitantes de este país, acostumbran a hacer cosas en son de ir en contra del sistema o de puro aburridos variar la rutina... Lo triste, es que siempre van solos, con suerte en grupos de 2 o 3. Aunque no faltan esos grupos después de una fiesta que ya se han tomado hasta el agua de la taza del baño, suben a la micro y cantan con una afinación que pareciera que los vidrios del bus estuvieran hechos de plástico, ya que no se rompen con tal sinfonía callejera... "..Con dinero y sin dinero, hago siempre lo que quiero, y mi palabra es la leeeeeeeyyyy..."...( me da a pensar, algo me dice que son los primeros macabeos cafiches que obedecen ante la pollera de la mujer...)... "no tengo trono ni reina, ni nadie que me comprenda, pero sigo siendo el rey..."...("no tengo trono ni reina"... la mujer lo abandonó... "ni nadie que me comprenda"... está solo despues de que lo gorrearon.... "pero sigo siendo el rey"... de los cornudos puede ser...)... lo extraño, es que se ríen de cosas que... bueno... me hacen preguntar a mi conciencia... ¿Qué tiene de chistoso?... "mi'ja, cosita... oiga... psssst... ¿por qué no nos baila un poquito?... ya pue'... "... o... "wena suegrita"... o ... "¡Mira a la calle oh!... uhhhh ... hey!... juiiiijuiuuuuu... Suba a la micro del amorshhhhh..." y tantas cosas... que entre quedarse a mirarlos y seguir el rumbo... ya para cuando responda esa disyuntiva estoy llegando a mi casa.

Esa es una cultura popular... aunque se respetan los derechos de autor... No creo poder dignarme a copiar dichas costumbres... no creo... no lo creo...

sábado, 5 de julio de 2008

Miserable...

¿De qué demonios me sirve creer en la gente?... siempre soy herida por ellos, siempre... No me queda mucho por hacer... me duele el pecho al pensar que me he separado de alguien especial... quiero llorar, aunque frente al mundo esté sonriendo, yo... ya no quiero más.

...Estoy obligada a actuar... a usar a las personas a mi antojo... buscar mi provecho antes que del resto... total... siempre hicieron eso conmigo y no veo por qué cambiar... además lograré mis objetivos con menor esfuerzo y dejaré a laspersonas como un trapo más en el suelo, que se llenen de polvo y pena... siempre buscaré un nuevo juguete más... una nueva utilidad, un nuevo provecho... No descansaré... completaré mi obra apesar de la gente que busque mi daño... Cada persona, caerá... Sufrirá lo que yo estoy sufriendo... las lágrimas que yo lloro cada día por personas que no valen absolutamente nada... Siempre me dejé frente a personas que creían tener la razón y que gracias a sus errores me tienen aquí... o mejor dicho me tuvieron aquí... el único recuerdo que tengo es el odio y el rencor de aquellos años que creí muerto...

...Hoy me he dado cuenta que no estoy sana de la cabeza... como dicen los doctores. Pero, eso ya lo sabía de antes... aunque es una enfermedad común entre los humanos, la diferencia está en el grado de daño... Todos tenemos el sentimiento egoísta dentro... separar lo nuestro del resto... Llevar a cabo nuestros objetivos sin ver los medios... Yo estoy enferma... y me da igual quien lea estas oraciones, mal que mal, no estoy mintiendo y estoy mencionando la ira que tengo en estos momentos... Pero bueno, la gente cree que está sana... por eso no comprenden lo que me pasa... Pobres miserables no saben que yo también soy una de ellos.