sábado, 15 de diciembre de 2007

Estudios humanos

Un ladrón he visto que asoma sus manos a las orillas de la puerta... Escondido, entre las sombras de la luz, abrigando dentro la esperanza de quitarme el sueño por su encuentro...

Las ambiguedades esta vez me llaman la atención, el quedar con la duda es bastante fastidioso aunque muy interesante de averiguar lo que es en la realidad. No se sabe cual sería el camino a tomar, bajo ese dejo indeterminado de las personas... "¿quiere un cafe? - mmmm, aunque tiene buen sabor el té... pero también el cafe... ah! no sé..."... Es bastante común que las personas, al no saber que hacer, le dan las cosas a otras... (hasta yo lo he hecho en varias oportunidades). Somos bastantes ambiguos al ver elecciones de las cosas... puede ser desde el cafe... hasta la ropa que llevamos... las cosas que comeremos, tantas situaciones, que ya esta costumbre forma parte de nosotros.

Hacemos cosas sin tener nada claro, nada definido... Muchos se lamentan después por lo que han pasado... (suspiro), hay muchos que no saben lo que hacen... titubean y temen sin razón. Desconfían de todos... dejandose llevar de sentimientos fantásticos y llenos de ilusiones a vidas imaginarias, bueno, otros no se dejan llevar por eso... Estoy conciente de que existen personas que muestran sus emociones y aman apesar de todo, muestran una armonía emocional muy agradable - sin considerar que padecen los dolores más profundos ante las desiluciones y cosas así; pero también tengo presente que apesar de desconfiar de todos, hay personas que no sienten absolutamente nada, miran todo como un objetivo a obtener y no muestran compasión para el resto - a ese grupo pertenezco... claro que lo oculto... a muchos les veo una utilidad material y a veces emocional que evita que los dañe, me limito a esperar de ellos. Como ya he dicho en mi blog primero, los veo como simples humanos.

Las personas que han tenido la pésima idea de fijarse en mi, han terminado mal... Siempre cubro mi naturaleza tras una sonrisa, risas inventadas y aventuras imaginadas dentro de mi computador al visitar páginas de adolescentes y sus problemas. Todos pueden confiar en mi, pero ¿yo podría confiar en alguno?, mi respuesta natural es... no. La otra, diría que sí... que tengo muchos amigos... que todos me han ayudado... que no me han dejado sola... (patrañas).

Yo ahora he visto personas en especial que me llaman mucho la atención con respecto a este tema y por lo menos estos meses y años que vienen, los estudiaré en silencio, veré cual es la realidad que muestran con sus ojos... algunos los leeré, otros probaré y a algunos degustaré. Será interesante saber de lo que serán capaces de hacer...